Hace unos años abrí mi propia clínica.
3 años después la traspasé, no porque fuera mal, al contrario, sino porque aprendí tanto de negocios, venta y persuasión, que tenía claro que podía conseguir muchas más cosas de otra manera.
Me di cuenta de varias cosas.
Una de ellas fue que tenía unas creencias limitantes muy bestias respecto al dinero que me habían estado lastrando durante años.
Otra es que existe una conexión directa entre la mentalidad y la capacidad de generar dinero.
Primero me ocupé de las creencias limitantes, luego me puse a investigar cuáles eran esas conexiones entre mentalidad y capacidad de generar dinero.
Vi claramente que existía una fuerte relación entre el cerebro y el dinero. Seguramente si te digo que el cerebro y la mentalidad van de la mano no te sorprende.
Pero si te digo que el cerebro y el dinero van de la mano puede que sí.
¿A qué me refiero?
Quién conoce cómo funciona el cerebro conoce cómo funciona el comportamiento humano.
Quién conoce cómo funciona el comportamiento humano conoce cómo funciona el dinero.
Quién conoce cómo funciona el dinero…
Shhhhhhhh, ojo! Olvídate de pensar que esto es una receta mágica para hacerte rico.
No creo en las recetas mágicas, ni en los gurús, ni en los atajos. No me siento a gusto prometiendo algo que sé que no depende de mí.
Por eso yo no prometo nada.
Solo te cuento lo que yo encontré de casualidad, que me ayuda cada día a tener una mentalidad más fuerte y que puede ser algo muy bestia para tu negocio si sabes sacarle el potencial.
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